Sedación en odontología: ¿Cuándo se realiza?

por Administrador Tratamientos

La sedación forma parte de la odontología. En la Clínica Such realizamos tratamientos de odontología y odontopediatría que requieren, en ciertas ocasiones, de la sedación del paciente. Hoy queremos ayudarte a perder el miedo a dicha sedación, por eso te hablaremos de cuánto y cómo se realiza la sedación en odontología.

Si tienes fobia o miedo al dentista. Si te molesta o desagrada la idea de la sedación y si quieres conocer en qué tratamientos se realiza una sedación en odontología, sigue leyendo esta notica. Te aportaremos información sobre la sedación en odontología. 

Sedación profunda: ¿Qué es y cuándo se realiza?

La sedación profunda se trata de un proceso de anestesia en el que se somete al paciente a un estado de sedación absoluta, para evitar ninguna molestia o dolor en la realización de una intervención o tratamiento odontológico. Es totalmente segura, se realiza para comodidad del paciente, ya que de ese modo no sentirá ningún dolor ni molestia durante la realización de un tratamiento. Es un proceso muy habitual que se hace con pacientes que tienen que realizar reconstrucciones en la cavidad oral, con extracciones o colocaciones de implantes. La sedación profunda también se realiza para extirpar quistes orales.

Cada día se realizan miles de sedaciones profundas sin ningún tipo de complicación médica. En la Clínica Such quien realiza estas sedaciones es un médico anestesiólogo colegiado que controlará en todo momento el estado del paciente. Tras realizar el tratamiento odontológico el médico valorará el estado del paciente, y el tiempo prudencial que debe permanecer en observación antes de poder marcharse a su casa. Lo habitual es que los pacientes se vayan a su casa ese mismo día, siempre y cuando hayan venido acompañados de algún amigo o familiar.

Sedación profunda: consejos para antes y después de la sedación

Antes de la sedación conviene tener en cuenta que el estado de salud en general del paciente que se someterá a la sedación ha de ser bueno. Esto implica que no debe estar resfriado, tener fiebre o cualquier otra situación que afecte a las mucosidades. Además deberá estar en ayunas para la sedación. Normalmente no se requiere de ninguna prueba previa, a no ser que el paciente tenga alguna complicación médica conocida de antemano.

El paciente no podrá consumir alcohol ni conducir después de la sedación. Es importante también que venga acompañado de un adulto responsable para su traslado al domicilio, ya que durante unas horas estará todavía ligeramente sedado. El tratamiento con sedación se realiza en la Clínica Such, donde se cuenta con la presencia de médicos especialistas en odontología y anestesia.

Desde la Clínica Such siempre aconsejamos la sedación profunda para evitar molestias y dolores. Después de la sedación los dolores serán ya mínimos, y se tratarán siempre con calmantes por vía oral.

Si tienes cualquier duda consúltanos sin compromiso. Estaremos encantados de dar respuesta a tus dudas e inquietudes sobre la sedación profunda o sobre cualquier otro tratamiento odontológico.